Lectura para ceremonia de boda civil. ¿Qué decir?

Si has llegado hasta aquí es porque tienes la suerte de participar en la ceremonia civil de un amigo o familiar. Los novios te han pedido que les dediques unas palabras en su boda y no tienes ni idea de por donde empezar. ¡Te ayudamos!

Lectura para ceremonia civil

La pareja de novios te ha pedido que escribas algo para que les leas en su ceremonia civil.  Sabemos que es muy difícil resumir y contar en tan poco tiempo toda una vida de amistad y anécdotas juntos, pero hay que hacer el esfuerzo. Si te han elegido a ti es porque eres importante para ellos, ¡siéntete afortunado!

A veces es más fácil distinguir lo que no nos gusta de lo que sí. Así que en este post vamos a hacerlo así, a la inversa. No te vamos a decir qué poner en tu discurso. Te vamos a decir lo que NO nos gusta que se diga durante las lecturas. Créenos, ¡te servirá de mayor ayuda!

La experiencia es un grado [o al menos eso dicen] y durante todo el tiempo que llevamos haciendo ceremonias de boda hemos observado que hay ‘errores’ que se repiten con frecuencia.

¡NO CAIGAS EN LOS MISMOS ERRORES!

¿Quieres saber cuáles son para evitarlos?

8 ERRORES COMUNES EN LAS LECTURAS DE BODA:

1. No drama

Estás en una boda. Eso significa que es un día alegre, de celebración, un día lleno de ilusión que ha sido preparado con mucho mimo y cariño. Es un día feliz para estar FELIZ. Así que por favor, ni se te ocurra pensar en los malos momentos, y menos aún, sacarlos a relucir en tu discurso.

Muchas personas quieren aprovechar su discurso para recordar a familiares de los novios que ya no están. Está bien, pero dirige tus palabras hacía anécdotas alegres que recuerden momentos bonitos y llenos de nostalgia ‘de la buena’. Evita que los novios se pongan tristes y a llorar como una magdalena. Créenos, no es el momento.

2. Lecturas largas

Piensa en las bodas a las que has ido. Son un buen ejemplo para darte cuenta en qué momento desconectaste y empezaste a pensar en ‘otra cosa mariposa’. Y es que está más que comprobado, en cuanto un amigo se alarga más de lo normal, desconectas. Recuerda: BREVE PERO INTENSO. Esa es nuestra premisa.

Coge tu reloj y cronometra, lo ideal son dos minutos y medio. Piensa que seguro que van a leer más amigos. Tranquilo que no te quedarás corto.

3. Tú no eres el protagonista

Los protagonistas son los novios. Por lo tanto, ellos son el motivo central de tu discurso. Piensa en momentos y anécdotas con ellos. Cuéntales a todos los invitados cómo son y no caigas en el error de centrar en ti las palabras que les quieres dedicar.

4. Frases típicas tópicas

‘Para aquellos que no me conozcan soy xxxxxx, amigo de xxxxxx.’ Probablemente cuando te llamen para que salgas a leer tu discurso ya te presenten. No te vuelvas a presentar.

‘Cuando los novios me pidieron que les dedicara unas palabras, miré en Internet y busqué textos para saber qué decir en una boda…’ No te vayas por las ramas, ve al grano y cuenta momentos y anécdotas bonitas y graciosas.

‘Y como se dice en las bodas: ¡Vivan los novios!’. Esto está bien para cerrar tu discurso siempre y cuando no lo hayan dicho ya antes. Si las personas que han salido a leer antes que tú ya lo han dicho… aborta misión. No repitas cosas que ya se han dicho si las puedes evitar.

5. Anécdotas que no tocan

La ceremonia es el primer momento de la boda. Quizás sea el momento más formal, y aunque nosotras siempre decimos que formal no es sinónimo de aburrido, tampoco hay que pasarse de gracioso. Por eso, ten cuidado con las anécdotas que vayas a contar.

En la boda se reúne mucha gente joven, pero también mayor, entre ellos las familias de los novios, los abuelos, los tíos… Más de una vez hemos tenido que ‘censurar’ alguna anécdota fuera de tono.

6. Copia-Pega

Nos encanta el libro ‘El Principito’, pero sus textos y frases se repiten hasta la saciedad en las bodas. Sé original. Hemos puesto este ejemplo pero hay muchos otros…

Nosotras siempre decimos que para que una ceremonia sea única basta con contar vuestras vivencias. No hace falta que leáis poemas o fragmentos de libros bonitos… a veces lo más bonito es algo tan sencillo como recordar momentos especiales.

7. Déjate aconsejar

Hay veces que relees tanto el discurso que no ves los posibles errores que tiene. Para esto hay dos opciones: deja pasar unos días y léelo de nuevo para detectarlos o, lee tu discurso a otra persona en voz alta y de paso vas practicando. Déjate aconsejar, si hay algo que no se entiende, cámbialo. Recuerda: frases cortas y sencillas. Te ayudará a no trabarte con los nervios.

8. Carta a los novios

Un error bastante frecuente es escribir tu discurso como si fuera una carta. Pero, la realidad es bien distinta, tu discurso no va a ser leído sino escuchado. Así que utiliza palabras que digas habitualmente y suena auténtico. Escribe puntos suspensivos para marcarte bien las pausas, onomatopeyas o expresiones propias del lenguaje oral. Te ayudará a la hora de leerlo.

¡Esperamos haberte servido de ayuda! Sobre todo piensa en lo importante que resulta el momento de la ceremonia para los novios y comparte esa ilusión con ellos. 

¡Ah! ¡Y sal a hablar siempre con una sonrisa en la cara! 🙂

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Novios Meraki: P&J
Fotografías: Por Parte de la Novia
Espacio:Molino Galán

¡Un Meraki-Beso!