Bodas íntimas o Micro weddings
MICRO WEDDINGS
Bodas íntimas, micro weddings, ‘minimonias’ (mini ceremonias), elopements… este último año es cuando más hemos oído hablar sobre la posibilidad de casarse en una ‘ceremonia íntima’.
Y es que, las restricciones en las celebraciones debido a la Covid-19 nos impiden ahora mismo pensar en una boda -o ‘bodón’- como los de antes y, hay que adaptarse a los tiempos que corren.
Pero, y dejando atrás la pandemia y todo por lo que nos está haciendo pasar, pensando en esas ‘mini ceremonias’ y su aumento estos últimos meses, realmente nos damos cuenta de que… no son nada nuevo. Al menos para nosotras.
La ceremonia de Dorian & Yusuf | Fotógrafo: Miguel Valls
En los 6 años que llevamos oficiando ceremonias de boda hemos asistido a muchas micro weddings. Esto es, bodas pequeñitas de no más de 30 o 40 personas.
Y, en todo este tiempo, siempre hemos pensado que estas celebraciones en petit comité tienen su ‘aquel’. El sentimiento de estar rodeado por tus ‘imprescindibles’, por las personas que sabes al cien por cien que nunca te fallarán, las hace únicas y muy especiales.
Y lo cierto es que, generar esa atmósfera tan íntima es a veces complicado cuando se trata de bodas con muchos invitados.
¿Es una micro wedding lo que buscas?
Creemos que es importante hablar sobre este tipo de celebraciones pequeñas para que veáis que es un opción igual de válida que una boda grande.
De hecho, algo que siempre nos contáis cuando hablamos de vuestra boda es que queréis invitar a gente cercana y huir de los ‘compromisos’. Y, siendo sinceras, hay que admitir que muchas veces os veis arrastrados por los deseos de ‘terceros’ a la hora de organizar vuestra boda y, acabáis cediendo en aspectos que sabíais que no queríais desde el principio.
Y, precisamente eso, en una celebración pequeña es más fácil de evitar. Todo lo que rodea a ese gran evento que queréis organizar se reduce a vosotros dos y los más cercanos, los que prácticamente están presentes en vuestro día a día.
Así que, si estás pensando en una celebración pequeñita, aquí te dejamos 5 motivos para terminar de convencerte de que una micro wedding es perfecta para ti.
5 razones por las que querrás una micro wedding
1. La intimidad
Los eventos pequeños tienen ese ‘no sé qué que qué sé yo’ que nos encanta.
Imagínate: tu pareja y tú rodeados de la familia más cercana y los amigos más especiales… En ese pequeño grupo que formáis están las personas más importantes de vuestras vidas, las que más queréis del mundo mundial. ¿Lo mejor de todo? Que el sentimiento, es mutuo.
Menos invitados es sinónimo de más tiempo de calidad con todos y cada uno de ellos durante tu boda (incluyendo tu pareja). Y es que, las parejas a veces no se dan cuenta de lo mucho que gira la boda en torno a sus invitados.
Les invitas para que compartan contigo un día muy especial y es obvio que quieres estar con ellos, hablando y disfrutando de su compañía. Pero, no hay que ser un genio en matemáticas para darse cuenta de que, cuantos más invitados tengas a tu alrededor, más gente tienes que saludar y con la que hablar.
A menudo lo vemos en nuestras ceremonias. Nada más acaba la ceremonia, la pareja se dirige hacia sus invitados para que les feliciten y, en ese momento, ya se separan.
Saludar a todos lleva lo suyo y, en muchos casos, la pareja no vuelve a juntarse hasta que entran al cóctel o el fotógrafo les hace algunas fotos.
A muchas parejas esto no les supone ningún inconveniente puesto que están acostumbradas a tratar con grandes grupos de gente y ser el ‘centro de atención’. Pero, a otras tantas, este momento les supone salir de su ‘zona de confort’, bien por su timidez o, bien porque les gusta pasar más desapercibidas.
Si eres de este ‘segundo grupo’ de personas, igual la idea de una ceremonia íntima te encaja más con la idea de boda que tenías en mente.
2. Menos costes
Esto es fácil de calcular, menos gente en tu boda es sinónimo de menos dinero a desembolsar para la ocasión.
De hecho, tener un reducido número de invitados también puede significar que puedes hacer más cosas con tu presupuesto y destinar tu dinero en lo que realmente quieras.
Quizás, invirtiendo menos dinero en tu boda, puedes destinarlo a otras cosas que también te hacen mucha ilusión como… ¡tu luna de miel!
3. Fácil planificación y logística
Planificar una boda para menos de 30 personas es mucho más sencillo que para 130, no os vamos a mentir. Con esto no queremos decir que organizar un evento pequeño sea pan comido pero, da menos calentamientos de cabeza.
Con menos invitados no hay que preocuparse tanto del ‘timing’ o de aspectos como el alquiler de autobuses, la entrega de las invitaciones de boda, la organización de las mesas o de encontrar una finca grande para eventos con tantas personas…
4. Menos estrés
Es un hecho. Es mucho más relajado planificar una boda pequeña.
El nivel de estrés no solo se reduce durante los meses que duran los preparativos si no, en el mismo día de la celebración en sí.
Cuando estás rodeado por las personas más cercanas a ti, te sientes relajado y menos preocupado por si algo no sale como esperabas.
Pero ojo, no os creáis que los nervios van a desaparecer… los nervios estarán. ¡Te estás casando!
5. Más opciones
Un número más reducido de gente es más fácil de ‘manejar’, por eso es más sencillo llevar a cabo todo lo que te gustaría hacer el día de tu boda y cómo te gustaría celebrarlo con cada uno de tus invitados.
Si lo que te apetece es celebrar tu boda en otra ciudad o incluso en otro país… ¡hazlo!
Las fotografías que estáis viendo en este post son de la micro wedding de Dorian & Yusuf. Ellos se casaron en Valencia el 20 de julio de 2019.
Y, puesto que nosotras conocemos su historia porque la contamos en su ceremonia de boda, os diremos que la pareja se conoció en Holanda y su primer viaje juntos fue a Valencia. Dorian había estudiado aquí y le hacía mucha ilusión volver con Yusuf, poder enseñarle los lugares donde había estado y, disfrutar de la ciudad con él.
Y les gustó tanto que, cuando hicieron planes de boda, ¡a Valencia que vinieron junto con todos sus invitados a casarse!
Fue increíble, ¡como irse de vacaciones con la motivación extra de irse de boda! La pareja planificó otras actividades para que sus invitados conocieran la ciudad y así en realidad la boda duró días.
¿Es o no divertido? Solo hace falta imaginación y preguntarse qué es lo que realmente quiere uno.
Un súper consejo
La moraleja de todo esto es que puedes tener el ‘tamaño’ de boda que quieras siempre y cuando te sientas feliz con ello. No os sintáis presionados por la tradición o por lo que otros han hecho antes que vosotros… no invitéis a gente por compromiso.
Rodéate de los que más os quieren. Rodéate de las personas sin las cuales sería impensable dar este gran paso para vosotros.
Gracias por las fotos Miguel Valls. ¡Siempre es un placer coincidir contigo!
¡Un Meraki-Beso!
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